Desde hace generaciones nos vestimos con artículos de piel, lucimos bolsos y complementos fabricados en cuero. ¿Y cuántas veces te has preguntado de dónde procede ese material, qué tipo de material es y el trabajo que hay detrás antes de que llegue a tus manos en forma de un bello artículo?
Puede ser que a veces lo hayas pensado, incluso que te hayas informado, sin embargo no es lo habitual.
En este post te voy a dar unas pinceladas sobre el tipo de pieles que nosotros usamos para la fabricación de nuestros bolsos y complementos. Hay muchos otros tipos de cuero, pero nos vamos a centrar en los más habituales:
*Piel vacuno de curtido vegetal artesanal.
*Piel vacuno de curtido al cromo.
*Piel de cabra.
Lo primero es explicar que se denomina curtido al proceso por el cual se transforma la piel en un material que se conserva a través del tiempo y posee características de flexibilidad, resistencia y belleza que le da gran valor comercial y estético.
En las industrias del curtido se utilizan las pieles de los animales en bruto que se obtienen como subproducto de las industrias cárnicas, y que, de no ser por el curtido, habría que depositarlas en botaderos, rellenos sanitarios o someterlas a incineración.
La siguiente foto explica muy bien el concepto de la utilización de pieles y cueros de la industria cárnica.
El curtido del cuero es un proceso que comienza con la curación de la piel en sal para reducir el porcentaje de humedad. Se puede hacer con sal húmeda, salando fuertemente las pieles y prensándolas en paquetes durante unos 30 días, o con salmuera y agitación durante unas 16 horas. Después estas pieles se mojan con agua limpia para eliminar la sal y con una solución de cal y agua para ablandar el pelo, que se elimina entonces usando una máquina y quitando los restos a mano con un cuchillo romo, proceso conocido como labrado.
El curtido puede ser realizado con productos vegetales o minerales, cuya diferencia te explico a continuación, mencionando los tres tipos de pieles más utilizados por nosotros, y en artesanía en general.
Vacuno curtido vegetal artesanal
Estas pieles se curten en un proceso artesanal tradicional pasado de generación en generación, utilizando recetas antiguas, transformando cueros mediante un proceso lento realizado en tambores de madera. Está basado en el uso de taninos naturales que se obtienen de diveros tipos de madera, como el castaño y el roble.
Entre sus muchas ventajas destacan que es el más natural y respetuoso con el medio ambiente (por lo que se puede reciclar), que los colores que produce el curtido vegetal son tonos ricos y cálidos que lucen en tonos más naturales, y que este tipo de pieles y cueros son más valiosos que los curtidos al cromo.
Se puede hablar también de ciertas desventajas, si así se pueden considerar, siendo alguna de éstas que en ocasiones el proceso del curtido vegetal puede tomar hasta 60 días (según para qué se desee emplear el cuero), que los colores que pueden resultar del curtido vegetal son limitados, y que hay que tener más cuidado con este tipo de pieles, por ejemplo con el calor directo.
Vacuno curtido al cromo
Hoy en día la mayoría de los cueros se curten mediante este proceso, que utiliza una solución de químicos, ácidos y sales, en la que se introducen las piezas de cuero dejando que se empapen durante unas horas. En principio salen todos con un tono azul claro, conocido como Wet Blue, sobre el que posteriormente se dan los tintes.
Es un proceso más rápido que el vegetal, pues en un día se puede producir una pieza.
Entre las ventajas que tiene el curtido al cromo están que los cueros salen más uniformes y firmes, que dispone de una variedad mucho más amplia de colorido, y que estos colores son más uniformes y brillantes.
Piel de cabra curtida
Este tipo de piel se curte al cromo, pues permite más amplios acabados en colorido y estampados. La mayoría de las pieles de cabra que nosotros empleamos para la fabricación de nuestros bolsos y complementos provienen de Italia, donde hacen un trabajo extraordinario de curtido natural y en fantasía.
Son pieles muy usadas en artesanía pues al ser más finas y ligeras son fáciles de trabajar, y los artículos resultantes, por tanto, menos pesados, algo que ahora mismo valora mucho un elevado número de consumidores.
Al ser pieles más pequeñas se dedican más para la fabicación de carteras, bolsos de tamaño reducido, e incluso para encuadernar.
En ocasiones mezclamos varios tipos de pieles, siempre buscando la originalidad de la pieza, la belleza estética y, por supuesto, la calidad.
Espero que este pequeño reportaje te haya servido para recibir un poco más de información sobre lo que hay detrás de lo que vistes, luces como complemento, e incluso de en qué y cómo inviertes.
Todas las fotos que aquí aparecen han sido efectuadas por Eva Callejo, la que suscribe este artículo. :)
Si te apetece saber un poco de historia sobre el curtido de pieles en Segovia, ciudad en la que nosotros fabricamos, te dejo tres artículos que te pueden aportar:
Gracias por llegar hasta aquí y por el apoyo recibido.